jueves, 4 de diciembre de 2008

Sucede


Hay instantes

en que necesitas decirle a alguien

cuànto extrañas su abrazo,

aùn sabiendo que ese alguien ya no puede dàrtelo.

Instantes donde vuelves a vivir integramente,

la alegrìa de las pequeñas cosas,

a encontrarte con tu esencia

a despertar bruscamente del sueño

que te mantuvo insensible y confundido

al sueño que te hizo perder el rumbo conocido.


Hay instantes

donde el dolor es tan profundo

que no puede expresarse en las palabras

que no puede compartirse,

que es tan tuyo, tan inexplicable. ...tan inentendible...

Hay instantes

donde guardas celosamentey en secreto

las palabras

que hùmedas de llanto

se disipan en lo fràgil del papel...

instantes,

en que no encuentras respuestas ni consuelo,

porque entiendes que el silencio

es una despedida,

DE LA VIDA.

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