En mi interior,
fuego
llamaradas de amor,
infierno,
hielo que se derrite
entre lenguas
que sacian el dolor
y los males del mundo.
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Pensarte una y otra vez en claroscuro. Pensarte sol Caminarte las orillas ...
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¿ Qué sería de mí si los diamantes de tu sonrisa dejaran de posarse en mi rostro florecido? Ese día, andaría sin rumbo hasta ... -
Ella. La que vive en la habitación de adentro, y no se deja despeinar por las olas en las tardes. Esa “otra”, que sacude al...
Todo un jardín de placeres en el cuerpo de quien inspira!
ResponderEliminarEscribes de maravilla eli.
Besitos y abrazos cariñosos
gracias bella Any por pasarte por mi casa
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